Visitar Machu Picchu en temporada de lluvias puede parecer un desafío, pero también es una oportunidad única para disfrutar de la ciudadela inca de una forma diferente. Si estás planeando tu viaje, ten en cuenta que la temporada de lluvias en la región de Cusco y Machu Picchu va de noviembre a marzo, siendo enero y febrero los meses con mayor intensidad. Aunque puede llover fuerte, las lluvias suelen ser intermitentes, con mañanas despejadas y lluvias en las tardes o noches; por eso lo recomendable es ir a la ciudadela durante la mañana.
Lluvias frecuentes y caminos resbalosos: Durante la temporada de lluvias puede ser que las precipitaciones sean intensas y que dificulten las caminatas, especialmente si haces el Camino Inca. Los senderos pueden estar fangosos y resbalosos, es por eso que, por seguridad, el Camino Inca cierra en febrero. Se recomienda que, al realizar tu viaje, lleves tus zapatos de trekking y ropa impermeable.
Un dato importante que tienes que conocer es que algunas actividades pueden cancelarse o retrasarse. Además, las condiciones climáticas pueden afectar la visibilidad de la ciudadela. Se recomienda llevar poncho impermeable, ropa de cambio, fundas para mochila, protección para tus dispositivos, botas antideslizantes y protector para tu cámara o celular. Reserva con anticipación si viajas en enero o marzo.